Hace unos meses dediqué un post a la comunicación confusa: http://www.laventadesdelastrincheras.com/2012/04/comunicacion-confusa.html
Recientemente he vuelto a recibir una curiosa fotografía, en esta ocasión proviene de un buen amigo de Badajoz, la cual es ilustrativa de los problemas que presenta el empaque y etiquetado (ahora llamado packaging).
Las claves de un buen etiquetado pasan por:
- Proteger el producto.
- Potenciar la imagen del contenido.
- Ofrecer promoción o valor añadido.
- Comunicar.
Un mensaje trasladado por un vendedor también va envuelto en su propio "packaging":
- Defensa de la marca (las agresiones en vez de ambientales provienen del mercado o la competencia). ¡Y ojo que también hay caducidad!
- Valorar la imagen de servicio, profesionalidad y calidad de la empresa.
- Articular promociones efectivas para lograr la máxima rotación y venta.
- Mantener una comunicación clara y bidireccional.
En este último punto es donde la fotografía nos revela que la brevedad y concisión solo es positiva si clarifica el mensaje. La comunicación nunca puede ser efectiva cuando damos por sobreentendido conceptos. "Pipas sin sal. Ingredientes: pipas y sal" queda ridículo.
Se sabe que las pipas casi siempre llevan algo de sal: algunas van en agua - sal y otras con la sal adherida al fruto seco, pero esta circunstancia no perdona el hecho de trasladar una información confusa y alejada de la realidad.
Este lenguaje, útil para otros sectores (política, por ejemplo), nunca debe estar presente en el mundo de las ventas.
Este lenguaje, útil para otros sectores (política, por ejemplo), nunca debe estar presente en el mundo de las ventas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario